El 17 de mayo de 2024, Rosa y Raúl celebraron una boda única y mágica en el Parador de La Manga del Mar Menor. Rodeados de familiares y amigos, vivieron un día inolvidable lleno de amor, emoción y detalles especiales. Desde la ceremonia simbólica con el ritual de la arena.
Ubicado en un entorno privilegiado, el Parador del Mar Menor ofreció el escenario perfecto para la boda de Rosa y Raúl. Con el mar como telón de fondo, la celebración se llenó de magia y romanticismo. Esto creó una atmósfera única que hizo que cada momento fuera aún más especial.


Uno de los momentos más emotivos de la ceremonia fue el ritual de la arena, una tradición simbólica. En este ritual, los novios vierten arena de diferentes colores en un mismo recipiente, representando la fusión de sus vidas en un camino común. Este gesto reflejó el compromiso y la fortaleza de su relación. Se convirtió en un instante cargado de significado.


Tras la ceremonia, la celebración se transformó en una auténtica fiesta. Rosa y Raúl sorprendieron a sus invitados con una barra libre muy original. Además de disfrutar de bebidas y cócteles, podían hacerse tatuajes como recuerdo de la boda. Un tatuador profesional estuvo disponible para quienes quisieron llevarse un diseño especial en la piel. Esto convirtió la experiencia en algo inolvidable.
Esta idea innovadora convirtió la boda en un evento aún más memorable, ofreciendo a los asistentes un detalle único y fuera de lo común


